Sariñena: Mario; Chino, Beltrán, Cilleruelo, Briz (Ezquerra, minuto 59); Diego Pérez, Josete, Calvete, Dani Segura; Figueroa (Calvete II, minuto 59), Bugui (Brunet, minuto 71).
Tal y como se preveía, el Sariñena no pudo superar la primera eliminatoria de la Copa Federación, cayendo eliminado a manos de un Real Zaragoza B, que demostró ser un adversario temible de cara al campeonato liguero. El marcador cosechado en El Carmen fue una losa demasiado pesada para los de Alfredo Muñoz que ayer, sin embargo, ofrecieron una mejor imagen y de haber tenido una pizca de fortuna, el tanteador podía haber sido otro, sobre todo en el primer tiempo. Tras el paso por vestuarios, Matas volvió a ofrecer un recital para colocar el 3-0 final en el luminoso.
Los hombre entrenados por Alfredo Muñoz salieron sin ningún tipo de complejo, dibujando un 4-4-2. Los locales, por el contrario, contrarrestaban con un 4-5-1 dejando como punta de lanza al verdugo monegrino Matas, que en el 0-4 de El Carmen consiguió tres goles y que ayer en Zaragoza inauguró en el minuto 7 el marcador. El atacante del filial se aprovechó de una buena triangulación y, tras una gran asistencia de Raphael, batió a Mario.
Los visitantes no se descompusieron y jugaron de tú a tú al filial. Su réplica no se hizo esperar. En el minuto 15 un centro chut de Juanjo Figueroa a punto estuvo de ser rematado por el central Beltrán. El juego, no obstante, se desarrollaba en gran medida en la parcela ancha. Figueroa y Bugui se mostraban como los jugadores más activos e incisivos en la capital aragonesa, pero sin fortuna de cara al gol.
En los últimos cinco minutos del primer tiempo se desataron las hostilidades. El primero en golpear fue el conjunto de Manolo Villanova con un disparo a quemarropa de Raphael que detuvo Mario. En el 42 pudieron empatar los de Muñoz, pero el disparo de Diego Pérez se escapó por escasos milímetros del arco defendido por Eladio. Y un minuto antes del descanso fue Mario el que salvó los muebles atajando un uno contra uno ante el habilidoso Raphael. Con el 1-0 parcial se alcanzó el tiempo de descanso.
Ya en la segunda mitad, los locales se mostraron muy superiores a los oscenses, sobre todo en el aspecto físico, demostrando que llevan más días de entrenamiento que su rival. De nuevo Matas encabezó el ataque de los zaragozanos y en el minuto 55 consiguió anotar un auténtico golazo. Sin tiempo apenas para la reacción, el propio Matas habilitó a Barba para que éste estableciera el resultado definitivo. A partir de entonces el dominio local fue insistente, pero el Sariñena supo defenderse con orden e impedir que las rentas aumentaran. Analizando el encuentro, Muñoz movió el banquillo para dar minutos al mayor número de efectivos posibles y así rodarles de cara al inicio liguero.
A pesar del 3-0 los monegrinos dejaron una más que aceptable imagen en Zaragoza, sobre todo en el primer tiempo, donde destacaron Bugui y Juanjo Figueroa.
Los hombre entrenados por Alfredo Muñoz salieron sin ningún tipo de complejo, dibujando un 4-4-2. Los locales, por el contrario, contrarrestaban con un 4-5-1 dejando como punta de lanza al verdugo monegrino Matas, que en el 0-4 de El Carmen consiguió tres goles y que ayer en Zaragoza inauguró en el minuto 7 el marcador. El atacante del filial se aprovechó de una buena triangulación y, tras una gran asistencia de Raphael, batió a Mario.
Los visitantes no se descompusieron y jugaron de tú a tú al filial. Su réplica no se hizo esperar. En el minuto 15 un centro chut de Juanjo Figueroa a punto estuvo de ser rematado por el central Beltrán. El juego, no obstante, se desarrollaba en gran medida en la parcela ancha. Figueroa y Bugui se mostraban como los jugadores más activos e incisivos en la capital aragonesa, pero sin fortuna de cara al gol.
En los últimos cinco minutos del primer tiempo se desataron las hostilidades. El primero en golpear fue el conjunto de Manolo Villanova con un disparo a quemarropa de Raphael que detuvo Mario. En el 42 pudieron empatar los de Muñoz, pero el disparo de Diego Pérez se escapó por escasos milímetros del arco defendido por Eladio. Y un minuto antes del descanso fue Mario el que salvó los muebles atajando un uno contra uno ante el habilidoso Raphael. Con el 1-0 parcial se alcanzó el tiempo de descanso.
Ya en la segunda mitad, los locales se mostraron muy superiores a los oscenses, sobre todo en el aspecto físico, demostrando que llevan más días de entrenamiento que su rival. De nuevo Matas encabezó el ataque de los zaragozanos y en el minuto 55 consiguió anotar un auténtico golazo. Sin tiempo apenas para la reacción, el propio Matas habilitó a Barba para que éste estableciera el resultado definitivo. A partir de entonces el dominio local fue insistente, pero el Sariñena supo defenderse con orden e impedir que las rentas aumentaran. Analizando el encuentro, Muñoz movió el banquillo para dar minutos al mayor número de efectivos posibles y así rodarles de cara al inicio liguero.
A pesar del 3-0 los monegrinos dejaron una más que aceptable imagen en Zaragoza, sobre todo en el primer tiempo, donde destacaron Bugui y Juanjo Figueroa.
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