La Liga Nacional Juvenil llega a su ecuador

La temporada en el grupo 6 de la Liga Nacional de juveniles ha llegado a la mitad. Disputadas 16 jornadas no hay nada decidido, pero si va quedando bastante claro quién va a luchar por lograr el ascenso, quién intentara evitar el descenso y quién no pasara apuros e intentara dar oportunidades a los más jóvenes, para así al año siguiente, buscar con la nueva generación, unos mejores resultados.

En la parte alta de la tabla, destaca el Real Zaragoza B, que una temporada más sigue arrasando en esta categoría, pero al ser filial no puede ascender y solo puede seguir sirviendo como formación y abastecimiento de jugadores para el equipo de División de honor. Los maños son lideres y además sin haber perdido un solo partido en toda la temporada, pero el dato más destacable es que solo han encajado cuatro goles en los 16 partidos disputados.

El grupo de cabeza perseguidor del Zaragoza B, lo forman tres equipos y entre ellos se van a jugar la plaza de ascenso a la División de honor para la siguiente temporada. Estos tres equipos son: Montecarlo, Oliver y Giner Torrero. Ninguno de los tres es favorito sobre el resto, aunque el Giner Torrero esta realizando un buen trabajo en los últimos años con muy buenos resultados, la temporada pasada ya fue tercer clasificado; el Oliver tras el año pasado pasar apuros para no descender, es una de las sorpresas gratas del campeonato; y para completar el trio de candidatos, el Montecarlo juega la baza a su favor de los grandes resultados que esta obteniendo en su inexpugnable campo de tierra, donde es el mejor equipo como local de la categoría.

En la zona media de la tabla y prácticamente sin opciones de luchar por la plaza de ascenso están: Ejea, Peñas Oscenses, Binéfar y Utebo. La situación de estos equipos es diversa, los dos primeros han decepcionado ligeramente, se esperaba que estuvieran en el grupo de cabeza luchando por ascender, pero se han quedado cortados y solamente una segunda vuelta espectacular les volvería a meter en la pelea.

Los otros dos casos, son distintos, el Binéfar descendió el año pasado de División de honor y el equipo se deshizo por completo entre los jugadores que acababan su edad de juveniles y otros que se fueron a otros clubs buscando seguir jugando en la categoría perdida. Este año a cargo de Jaime Naya se ha hecho un equipo nuevo por completo, en el que solo un par de jugadores de la temporada pasada forman parte de la plantilla, el objetivo es la permanencia y buscar la mejora de las jóvenes promesas. Los celestes están realizando una buena campaña y parece que cumpliran a final de temporada sus objetivos.

El Utebo es el caso opuesto al Binéfar, vienen de ascender de juvenil preferente y se ha asentado a la perfección a la categoría, tal vez se le podría colgar el cartel de revelación del campeonato, si todo continua como hasta ahora no deben tener ningún problema para salvarse.

A partir de la novena plaza, todos luchan por evitar el descenso. Dos equipos merecen mención aparte. Son el Amistad B y el Balsas Picarral B, estos tienen que mirar dos clasificaciones simultaneamente. Además de intentar evitar por si mismos caer en las últimas posiciones, tienen que estar atentos porque un descenso de su primer equipo a Liga Nacional, les arrastraría a la juvenil preferente de forma inmediata (en estos momentos el Balsas Picarral es colista en su grupo de División de honor y el Amistad esta tan solo un punto por encima del descenso).


Además de estos dos equipos filiales ya citados, otros siete (El Olivar, S. Gregorio Arrabal, S. Domingo Juventud, At. Monzón, At. Calatayud, Stadium Venecia y La Salle) luchan por evitar las cuatro posiciones de descenso.

El Olivar es el que más sorprende que este situado tan abajo en la clasificación, su paso por la División de honor no le ha sentado nada bien y le esta costando acostumbrarse de nuevo a esta categoría.

S. Gregorio Arrabal y S. Domingo Juventud, después de tener una temporada tranquila el año pasado, este les toca volver a sufrir para no descender.

At. Monzón y Stadium Venecia al igual que la temporada pasada siguen frecuentado posiciones peligrosas o muy cercanas a ellas, el año anterior no les fue mal, al acabar salvándose en las jornadas finales, pero que tengan cuidado, porque el que juega con fuego se quema.

At. Calatayud y La Salle buscan consolidarse en la categoría tras su ascenso la temporada anterior. Un arranque horroroso estuvo apunto de condenarles, pero han sabido reaccionar, todavía siguen en descenso a mitad de temporada, pero si siguen en progresión como hasta ahora, tendrán sus opciones para salvarse.

Hasta aquí solo se ha escrito la mitad del guión, la otra mitad falta por disputarse y el 11 de Mayo cuando acabe la liga, por fin sabemos quién se llevara la gloria y quién arderá en las llamas del infierno.