jueves, 19 de junio de 2008

Nuestra atención se centra en Segunda

Ante la ausencia de equipos aragoneses en Primera División y en Segunda B nuestra atención para la próxima temporada tendrá que estar obligatoriamente en la división de plata del fútbol español, donde Huesca y Zaragoza lucharan por distintos objetivos. Los oscenses intentaran evitar el descenso y asentarse en la categoría y los maños pelearan por ascender lo más rápidamente posible a donde les corresponde, la Primera División.

La última vez que el Real Zaragoza descendió a Segunda División fue en la temporada 2001-02. En aquellas temporada militaban buenos jugadores en el equipo blanquillo: Milosevic, Juanele, M. Vales, J. Ignacio, Acuña, Aguado y Lainez entre otros, pero estos no pudieron evitar la hecatombe, como tampoco lo han sabido hacer esta temporada los Diego Milito, Aimar, Oliveira, Ayala, Zapater, Cesar y demás compinches del descalabro maño.

La parte positiva de todo esto es que el año que viene habrá un precioso derbi aragonés entre Real Zaragoza y Huesca, a pesar que en la capital aragonesa no haga mucha gracia.

El Real Zaragoza parte con la imperiosa necesidad y la presión de lograr el ascenso inmediatamente para la próxima temporada, la última vez así ocurrió. Al mando de Paco Flores y con jugadores como Yordi, Galca, Galleti y las irrupciones de los canteranos Cani e Iban Espadas los blanquillos recuperaron en un año la categoría perdida gracias a su segundo puesto en la temporada 2002/03.

Ahora de cara a la temporada 2008/09 Marcelino será el encargado de convertir en realidad este proyecto de Agapito que ha sido interrumpido en su proyección con el descenso. Todavía no hay nombres confirmados oficialmente como refuerzos, pero todo hace entrever que el equipo será bastante competitivo.

El Huesca por su parte, todavía disfruta de las celebraciones y no quiere pensar de momento en el futuro. La continuidad de Onésimo se presume complicada y ya suenan bastantes candidatos como sucesores del vallisoletano. Parece que la mayoría de los jugadores de la plantilla van a continuar y se reforzaran con unos cuantos fichajes para dar el salto de calidad que requiere la Segunda División.

Todavía faltan más de dos meses para que la competición oficial ponga el balón en juego, pero la ilusión de muchos aficionados ya tienen fijadas como punto de mira la próxima temporada de una apasionante Segunda División con claro sabor aragones.

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